Implantología
Un implante dental es un dispositivo artificial, generalmente hecho de titanio, que se inserta en el hueso de la mandíbula o del maxilar, actuando como una raíz dental. Sobre este implante se coloca una corona, puente u otro tipo de prótesis para restaurar la funcionalidad y estética del diente faltante. A continuación, se explican algunos de los conceptos más específicos en relación con nuestra especialidad:
1. Cirugía guiada
Este procedimiento utiliza la tecnología (escáneres 3D y software especializado), para planificar y guiar la colocación de implantes dentales con precisión. Mediante una planificación digital previa, se confecciona una guía quirúrgica que permite colocar los implantes en la posición exacta, optimizando los resultados tanto funcionales como estéticos. Este método reduce el riesgo de errores, disminuye el tiempo de cirugía y mejora la recuperación del paciente ya que muchas veces nos permite la colocación mediante una mínima incisión en la encía.
2. Regeneración ósea
Es un procedimiento que tiene como objetivo aumentar o restaurar la cantidad de hueso en las zonas donde se van a colocar los implantes. La regeneración ósea puede realizarse utilizando injertos de hueso propio del paciente, materiales sintéticos o biocompatibles que estimulan el crecimiento del hueso nuevo. Esto es crucial en implantología, ya que un implante necesita una base ósea suficiente para garantizar su estabilidad y éxito a largo plazo. Las técnicas empleadas deben adecuarse al paciente, defecto óseo que presente y a la rehabilitación implantológica que se ha coordinado.
Cada una de estas técnicas juega un papel esencial en la rehabilitación oral avanzada, brindando soluciones personalizadas según las necesidades del paciente y las condiciones anatómicas del hueso.
3. Carga inmediata
La carga inmediata es una técnica en la que los implantes dentales, una vez colocados, reciben una prótesis provisional o definitiva en un plazo muy corto, a veces incluso el mismo día de la cirugía. Esto contrasta con los métodos tradicionales, en los que se espera un período de cicatrización de varios meses antes de colocar las coronas. La carga inmediata mejora el confort del paciente, ya que no es necesario esperar largos períodos de tiempo sin dientes, y puede acelerar el tratamiento completo. Hemos de tener en cuenta que no todos los pacientes y/o rehabilitaciones son candidatos a poderse cargar de forma inmediata, te aconsejaremos y coordinaremos con tu odontólogo sobre ello.
4. Implantes cigomáticos
Son implantes especiales diseñados para pacientes con una severa pérdida de hueso en la parte superior del maxilar, donde los implantes tradicionales no pueden ser colocados debido a la falta de soporte óseo. En estos casos, los implantes cigomáticos se anclan en el hueso cigomático (pómulo), proporcionando una solución estable y efectiva para rehabilitar la dentadura. Esta técnica se usa generalmente en casos complejos y evita la necesidad de realizar injertos óseos extensos.
5. Implantes subperiósticos
Son implantes que se colocan debajo del periostio (la membrana que cubre el hueso) y sobre el hueso maxilar, en lugar de ser insertados dentro del hueso. Esta técnica es menos común y se utiliza principalmente en pacientes con una atrofia ósea tan severa que no pueden recibir ni implantes tradicionales ni cigomáticos. Los implantes subperiósticos se diseñan a medida y se ajustan a la forma del hueso, ofreciendo una solución alternativa para la colocación de prótesis dentales.
